Tratamiento del prurito anal
Al tratarse de una patología influida por diversos factores su tratamiento depende de la causa que lo origine. Desde el punto de vista proctológico, los expertos señalan que el prurito anal se trata sobre todo con una higiene adecuada lo cual significa que no debe haber ni una incorrecta higiene ni un exceso de higiene ya que también es perjudicial.
Por otro lado, el prurito anal se trata con una buena hidratación del margen anal. Esto se consigue intentando evitar en la medida de lo posible las pequeñas grietas que se forman en el ano. Estas grietas sobre todo son causadas por el estreñimiento del paciente o, justo por lo contrario, las deposiciones líquidas o diarrea.
Para lograr esta hidratación y prevenir la aparición del picor o prurito anal se puede utilizar vaselina como lubricante a la hora de ir al baño. Si con este tratamiento no mejora el picor el proctólogo suele indicar la administración de algún antihistamínico para evitar ese picor. Sin embargo, la forma más eficaz de tratar el prurito anal es conocer con exactitud la causa que lo produce.