Deja atrás el dolor y retoma tu vida con confianza con el Modo Dr. Padrón

Las fisuras anales, pequeñas pero dolorosas rasgaduras en el revestimiento del ano, pueden transformar las tareas cotidianas en desafíos insoportables. Pero no tienes que convivir con el dolor y la incomodidad.

En el Instituto Proctológico Dr. Padrón, nos dedicamos a mejorar tu calidad de vida. Con más de 35 años de experiencia en el tratamiento de patologías proctológicas, el Dr. Padrón ha perfeccionado un enfoque innovador para el tratamiento de las fisuras anales. Este método combina la precisión quirúrgica con una atención al paciente excepcional, para proporcionarte una solución eficaz, cómoda y mínimamente invasiva.

El Modo Dr. Padrón consiste en intervenciones quirúrgicas ambulatorias realizadas con anestesia local, diseñadas para un rápido retorno a tus actividades diarias. Estas técnicas avanzadas minimizan el dolor y aceleran la recuperación, permitiéndote retomar tu vida con confianza. Si estás lidiando con síntomas como dolor durante y después de la defecación, sangrado de color rojo brillante en las heces o picor en la zona anal, no tienes que sufrir en silencio

Nuestro equipo de expertos está listo para evaluar tu caso y proporcionarte la atención que necesitas. Agenda tu cita en nuestros centros de Gran Canaria o Tenerife llamando al 928 244 713 o al 922 257 820.

También puedes solicitar una cita a través de nuestro formulario en línea. Con el Instituto Proctológico Dr. Padrón, estás a un paso de decir adiós al dolor.

Una fisura anal es una pequeña herida o desgarro que se produce en la piel que recubre el canal anal. Esta afección puede causar dolor intenso durante y después de las evacuaciones intestinales, así como sangrado.

La causa más común de las fisuras anales es el traumatismo o la lesión en la zona anal. Algunas situaciones que pueden dar lugar a una fisura incluyen:

  • Estreñimiento crónico: El esfuerzo excesivo al defecar debido al estreñimiento puede dañar la piel del canal anal y provocar una fisura.
  • Esfuerzo defecatorio excesivo puntual. Suele ser frecuentes en personas que tienen bastante estrés.
  • Diarrea crónica: Las deposiciones frecuentes y líquidas pueden irritar la piel anal y aumentar el riesgo de desarrollar una fisura.
  • El sexo anal suele ser una de las causas que ocasione fisuras anales.

Además, otras condiciones médicas pueden aumentar el riesgo de desarrollar fisuras anales, como la enfermedad inflamatoria intestinal, las hemorroides y los trastornos que afectan la consistencia de las heces.

Estos son algunos de los síntomas más comunes que alertan de una posible fisura anal:

  • Dolor anal intenso durante y después de las evacuaciones intestinales.
  • Sensación de ardor o picazón en el área anal.
  • Presencia de sangre brillante en el papel higiénico o en las heces después de defecar.
  • Pequeña herida visible en la piel cerca del ano.
  • Contracción o espasmo del esfínter anal, lo que dificulta la relajación adecuada y acentúa el estreñimiento.

Si experimentas alguno de estos síntomas, es importante que busques atención médica para obtener un diagnóstico adecuado.

El sexo anal puede aumentar el riesgo de desarrollar una fisura anal debido a la presión ejercida sobre el área anal y al estiramiento excesivo de los tejidos. Además, la falta de lubricación adecuada o la realización de movimientos bruscos pueden contribuir a la aparición de fisuras.

Es importante destacar que la fisura anal puede afectar tanto a hombres como a mujeres que practican el sexo anal. Los síntomas comunes incluyen dolor intenso durante las relaciones sexuales, sangrado anal, sensación de ardor y dificultad para evacuar.

Es crucial que, en caso de llevar a cabo este tipo de prácticas sexuales, se realicen con una adecuada lubricación y precaución para prevenir esta problemática.

La toxina botulínica (Bótox) se ha utilizado durante muchos años en medicina estética y en el tratamiento de otras patologías. En el Instituto Dr. Padrón utilizamos este tratamiento en el campo de la Proctología, para tratar las fisuras anales, debido a su alta eficacia y a los excelentes resultados que obtenemos.

Este tratamiento está indicado en algunos casos y se oferta según criterio médico, es decir, serán nuestros expertos quienes decidan si el paciente es apto o no y si el tratamiento es el idóneo.

Consiste en:

  • Realizar dos pequeñas inyecciones en el esfínter anal interno.
  • De esta forma se paraliza temporalmente el esfínter anal, lo que favorece la llegada de sangre a la zona de la fisura y su cicatrización.

El tratamiento se realiza sin cirugía, con anestesia local y en un entorno ambulatorio. Además, el paciente puede retomar su vida normal después del procedimiento.

El paciente notará una mejora rápida durante las primeras 72 horas, que es el tiempo necesario para que el tratamiento actúe sobre el espasmo esfinteriano.

Cuando los tratamientos médicos (pomadas) no han dado resultados o se trata de fisuras anales crónicas (de larga duración), se recomienda realizar un procedimiento quirúrgico llamado esfinterotomía lateral interna.

Este es el procedimiento de referencia para los expertos a nivel nacional e internacional en el tratamiento de las fisuras anales.

Consiste en cortar parte de las fibras del esfínter anal interno para aliviar la contracción y permitir que los bordes de la fisura se cierren nuevamente.

En el Instituto Proctológico Dr. Padrón, llevamos a cabo esta cirugía de forma ambulatoria y utilizando anestesia local, lo que permite realizar una cirugía menos invasiva. Al utilizar este tipo de anestesia, no hay pérdida de tono muscular en la zona durante la intervención. De esta forma, en ningún momento se pierde la contracción del esfínter y se reduce al máximo el riesgo de incontinencia anal.

Otra de las ventajas de la cirugía al Modo Dr. Padrón es que no utilizamos dilatadores y esto permite una mayor precisión en la cirugía. Así es menos invasiva y permite al paciente tener una recuperación más rápida.

La fisura anal es una pequeña ruptura o desgarro en el revestimiento del canal anal. Esta condición puede causar varias molestias en el día a día, entre las cuales se incluyen:

1 Sentarse cómodamente: El dolor causado por una fisura anal puede hacer que sea incómodo sentarse durante períodos prolongados.

2 Actividad física: El ejercicio o cualquier actividad física que ponga presión sobre el área anal puede resultar doloroso.

3 Viajar: Puede ser difícil, especialmente cuando involucra vuelos largos o viajes en coche, ya que estos pueden requerir estar sentado durante períodos prolongados.

4 Función intestinal: El proceso de defecación puede ser extremadamente doloroso, lo que puede llevar a una persona a evitarlo, lo que a su vez puede resultar en estreñimiento.

5 Sexo: Dependiendo de la gravedad de la fisura, las relaciones sexuales pueden resultar incómodas o dolorosas.

6 Concentración en el trabajo o estudios: El dolor constante o intermitente puede dificultar la concentración en las tareas.

7 Sueño: El dolor puede interrumpir el sueño, lo que puede llevar a la fatiga y disminuir la calidad de vida.

8 Socializar: La incomodidad y el dolor pueden hacer que sea menos atractivo salir y socializar con amigos y familiares.

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