Se calcula que el prurito anal suele afectar entre un 1 y un 5% de la población, siendo hasta 4 veces más probable en hombres que en mujeres. Esta patología se caracteriza por sensación de escozor o picazón en el ano, presentándose normalmente tanto en el interior del canal anal como en el margen anal.

El picor puede empeorar por la noche o después de la defecación. Es recomendable no rascarse, ya que se produce una mayor irritación y empeoramiento. Además, el hecho de rascarse con las uñas puede ocasionar daño en la piel e incluso una infección de la zona.

Podemos hablar de dos tipos de prurito anal:

  • Prurito anal primario (idiopático). No tiene ninguna causa subyacente, y es el tipo más común (cerca del 50-90% de casos)
  • Prurito anal secundario. Puede deberse a muchas causas subyacentes: infecciones, dermatitis por contacto o problemas dermatológicos, enfermedades sistémicas, etc.

Factores que pueden causar picor anal

El picor anal normalmente se presenta sin causa aparente, desconociéndose su origen. Sin embargo, podemos relacionar su aparición con alguno de estos factores:

  • La aparición de hemorroides, fístulas o fisuras.
  • La falta de higiene o una higiene incorrecta.
  • Irritaciones producidas por diarrea, deposiciones líquidas o incontinencia fecal.
  • Infecciones producidas por enfermedades de transmisión sexual (ETS).
  • Algunos problemas o enfermedades cutáneas.
  • Enfermedades crónicas como la diabetes o la enfermedad de tiroides.
  • Causas idiopáticas, es decir, que puede ser producido por causas psicosomáticas como el estrés o el nerviosismo.

¿Qué puedo hacer para aliviarlo?

Desde el Instituto Proctológico Dr. Padrón, hemos elaborado una Guía de Recomendaciones para que sepas como aliviar el prurito anal (DESCÁRGATELA AQUÍ). Entre ellas, destacamos:

  • Después de la defecación, lo más conveniente es lavarse con agua y jabón y luego secar bien la zona (para ello puedes emplear una toalla o un secador de pelo).
  • Evita el uso de pomadas con corticoides por periodos largos de tiempo, ya que a largo plazo, los corticoides empeoran el prurito.
  • Durante el día, procura que la zona NO esté reseca, lubricando la zona perianal y el margen anal con cremas o aceites hidratantes. La zona debe estar seca (no húmeda) pero evitando que la piel se reseque y se agriete.
  • Reduce el consumo de cítricos y sus jugos, bebidas alcohólicas, el café, los picantes, el chocolate y los frutos secos. Estos productos empeoran el picor.
  • Es aconsejable tener un buen hábito intestinal, con una deposición diaria pero sin forzar ni utilizar laxantes.
  • Los hábitos de vida saludables como una buena dieta, hidratarse bien, ejercicio y buen descanso son siempre aconsejables.
  • Usa ropa interior holgada (evita la lana y el nailon).
  • Intenta eliminar el estrés en tu día a día: hay un alto porcentaje de pacientes que desarrollan prurito anal por estrés. En estos casos, se aconseja realizar algún tipo de actividad física que ayude a desconectar.

¿Cuándo acudir al médico?

Es recomendable consultar este problema a un médico cuando:

  • El picor anal sea continuo o intenso.
  • Existe sangrado anal o incontinencia fecal.
  • Pueda tratarse de alguna infección en la zona anal.

¿Padeces este problema? En el Instituto Proctológico Dr. Padrón podemos ayudarte. Llámanos y pide cita.