Fisura anal
Las fisuras anales son muy frecuentes en los bebés, aunque también pueden afectar a personas de cualquier edad. La mayoría de las fisuras anales mejoran con tratamientos simples, como por ejemplo consumir más fibra o hacerse baños de asiento. Algunas personas con fisura anal podrían necesitar medicamentos o, en ocasiones, cirugía.
Pueden producirse al evacuar heces grandes y duras. Las fisuras anales suelen provocar dolores y sangrado durante la evacuación intestinal. También podrías sentir espasmos en el anillo de músculo que está en el extremo del ano (esfínter anal).
Los síntomas de una fisura anal incluyen:
- Dolor, a veces, intenso, durante las evacuaciones intestinales
- Dolor, que puede durar hasta varias horas, después de las evacuaciones intestinales
- Sangre de color rojo brillante en las heces o en el papel higiénico después de una evacuación intestinal
- Picazón o irritación alrededor del ano
- Una grieta visible en la piel que rodea el ano
Causas de la fisura anal
Las causas frecuentes de la fisura anal incluyen:
- Expulsión de heces grandes o duras
- Estreñimiento y esfuerzo en las evacuaciones intestinales
- Diarrea crónica
- Inflamación de la región anorrectal, causada por la enfermedad de Crohn u otra enfermedad intestinal inflamatoria
- Parto
Factores de riesgo
Los factores que pueden aumentar el riesgo de sufrir una fisura anal incluyen:
- Primera infancia. Muchos bebés sufren una fisura anal durante el primer año de vida, aunque se desconoce la causa que la origina.
- Edad avanzada. Los adultos mayores pueden sufrir una fisura anal a causa de la circulación lenta que reduce el flujo sanguíneo en la zona del recto.
- Estreñimiento. El esfuerzo durante la evacuación intestinal y la eliminación de heces duras aumenta el riesgo de desgarro.
- Parto. Las fisuras anales son más frecuentes en las mujeres después del parto.
- Enfermedad de Crohn. Esta enfermedad intestinal inflamatoria causa la inflamación crónica del intestino, por lo que el revestimiento del conducto anal puede volverse más vulnerable a los desgarros.
- Relaciones sexuales anales.