La solución más eficaz para tus hemorroides
En el Instituto Proctológico Dr. Padrón, estamos convencidos de que nuestras técnicas son las más avanzadas y las que mejor se ajustan a cada patología.
- Cirugía mínimamente invasiva que no requiere ingreso hospitalario.
- Realizada con anestesia local, ofreciendo excelentes resultados.
- Postoperatorio más rápido y menos doloroso, permitiendo al paciente volver a la vida normal mucho antes y evitando largos periodos de convalecencia y baja médica.
- Seguimiento exhaustivo al paciente tras la operación, pidiéndole que acuda en varias ocasiones para ir monitorizando su evolución. Este proceso de atención continua les hace sentir cómodos, seguros y muy cercanos con nuestro equipo médico y auxiliar.
Más del 90 % de los pacientes que acuden a nuestras consultas serían candidatos a un tratamiento mínimamente invasivo. Este tipo de técnica posibilita una recuperación casi inmediata, ya que el paciente puede hacer vida normal desde el mismo día de la intervención, sin dolor y casi sin complicaciones.
Las hemorroides o almorranas son dilataciones del tejido mucoso que se encuentra en el interior del canal anal y en el margen del ano. Existen diferentes tipos de hemorroides que, habitualmente, se clasifican en hemorroides leves, aquellas comprendidas entre los grados I y II, y hemorroides más severas cuya terminología son los grados III y IV.
Para conocer exactamente el tipo de hemorroides que padece un paciente es necesario acudir al médico experto en Proctología para que pueda realizar un diagnóstico y, posteriormente, indicar el tratamiento adecuado para él.
Acudir a la consulta del médico experto en Proctología es el primer paso para el correcto diagnóstico de las hemorroides. Normalmente los pacientes que acuden refieren dolor, sangrado, picor o inflamación en el canal anal.
El médico experto en Proctología es el profesional encargado de estudiar la zona anal para diagnosticar esta patología o descartarla si se trata de otra patología proctológica. Todo ello se lleva a cabo a través de una exploración física y una inspección visual que realiza el médico tras una entrevista previa con el paciente.
Las hemorroides se deben de operar cuando sangran de forma abundante (de forma que el paciente pierde más sangre de la que puede generar, lo cual le genera anemia) o cuando duelen, independientemente del grado clínico que tengan.
Cuando un paciente consulta por hemorroides sintomáticas, primero siempre se debe de intentar regular el ritmo intestinal y ajustar los hábitos de vida para que sean saludables. Si a pesar de todo ello, el sangrado persiste o tiene importante dolor, la solución debería de ser quirúrgica.
Los tratamientos mínimamente invasivos para el manejo de este tipo de hemorroides son:
a) Tratamiento de Hemorroides con Escleroterapia: Es mínimamente invasivo, poco molesto y realizado de forma ambulatoria en consulta. No requiere anestesia ni cuidados específicos. Consiste en inyectar una microespuma esclerosante dentro de la hemorroide para conseguir que el plexo venoso se colapse y cicatrice. El procedimiento es indoloro. Es muy importante el punto de inyección y prestar especial atención a que el esclerosante quede albergado en la capa submucosa del recto y no en la mucosa. Se recominenda sobretodo en hemorroides de Grado I y II. Para los Grados 3 y 4 podría funcionar también pero aquí suelen ser más efectivas las técnicas quirúrgicas.
b) Ligadura con banda elástica: Entre las técnicas modernas, la ligadura elástica o ligadura con banda elástica ocupa el primer lugar por su seguridad, sencillez, rápida recuperación y escasas molestias. Esta técnica consiste en la supresión del riego sanguíneo del tejido hemorroidal mediante una anilla elástica previamente estirada y colocada alrededor de una cápsula aspiratoria que provoca, al ser colocada, necrosis (destrucción) del tejido hemorroidal provocando su desaparición.
Según los expertos, estadísticamente entre un 5 y un 10% de quienes padecen hemorroides requerirán una intervención quirúrgica para eliminarlas de forma eficaz. Por esta razón, en los casos de hemorroides de grado III-IV se plantean diferentes técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas como solución. Al tratarse de hemorroides de mayor grado es necesaria una intervención más compleja por lo que se tratan en fases para evitar la realización de una intervención agresiva. De esta forma, se extirpan las hemorroides en varias sesiones quirúrgicas ambulatorias, con anestesia local y sin necesidad de baja médica para evitar el postoperatorio doloroso de una cirugía más agresiva.
